El Mundial de la FIFA de 1950 es uno de los torneos más recordados en la historia del fútbol. Celebrado en Brasil, este campeonato fue el primero desde 1938, ya que la Segunda Guerra Mundial había interrumpido las ediciones de 1942 y 1946. A diferencia de los anteriores, el Mundial de 1950 contó con una fase final en formato de liguilla, y fue aquí donde se dio uno de los momentos más impactantes del fútbol mundial: el famoso “Maracanazo“.
Países participantes y formato
El Mundial de 1950 reunió a 13 selecciones de distintas partes del mundo. Sin embargo, las ausencias notables fueron numerosas. Alemania y Japón no participaron debido a las sanciones tras la guerra. Además, Francia y Turquía se retiraron poco antes del torneo, mientras que Argentina, Escocia e India, quienes estaban clasificadas, decidieron no asistir por distintas razones.
Los equipos que participaron fueron: Brasil, México, Yugoslavia, Suiza, Inglaterra, Chile, España, Suecia, Italia, Paraguay, Bolivia, Uruguay y Estados Unidos. El formato consistió en una fase de grupos en la que los equipos se dividieron en cuatro grupos. Los ganadores de cada grupo avanzaron a una fase final, donde jugaron todos contra todos en una liguilla para determinar al campeón.
Uruguay en el torneo
Uruguay, campeón en 1930, volvía al torneo tras ausentarse en 1934 y 1938. El equipo sudamericano comenzó su participación en el Grupo 4, donde solo debía enfrentarse a Bolivia, pues Francia se había retirado. Uruguay se impuso con contundencia, venciendo a Bolivia 8-0 en su único partido de la fase de grupos, con una destacada actuación de sus delanteros.
Este resultado clasificó a Uruguay directamente a la fase final de liguilla, donde se mediría contra Brasil, España y Suecia.
En la fase final, Uruguay comenzó enfrentándose a España en un partido que terminó 2-2. Fue un encuentro muy parejo, en el que ambos equipos demostraron su habilidad y resistencia. En su siguiente partido, Uruguay se midió contra Suecia y logró una victoria ajustada de 3-2, en un duelo lleno de intensidad y emoción. Estos resultados permitieron a Uruguay llegar al último partido contra Brasil con la posibilidad de luchar por el título.
Brasil en el torneo
Brasil, el país anfitrión, comenzó el torneo en el Grupo 1, junto a México, Suiza y Yugoslavia. En su primer partido, Brasil venció cómodamente a México 4-0, con un gran desempeño de su línea ofensiva. En su segundo encuentro, empató 2-2 contra Suiza, un partido en el que los brasileños no lograron mostrar su mejor nivel. Sin embargo, Brasil aseguró su clasificación al vencer a Yugoslavia 2-0, obteniendo el primer lugar en su grupo.
En la fase final de liguilla, Brasil mostró un desempeño dominante en sus primeros dos partidos. Goleó a Suecia 7-1 en su debut en la liguilla y luego aplastó a España 6-1. Estos resultados generaron una enorme expectativa entre los aficionados brasileños, quienes veían casi seguro que el título se quedaría en casa.
La fase final: Todos contra todos
La última fase del torneo se jugó en un formato de liguilla. Cada equipo jugó contra los otros tres, y quien acumulara más puntos sería el campeón. Brasil comenzó de manera arrolladora, mientras que Uruguay empató su primer partido 2-2 contra España y luego venció a Suecia 3-2 en un duelo reñido. Esto dejó a Brasil y Uruguay como los equipos más fuertes en la carrera por el título.
Para el último partido, Brasil solo necesitaba un empate para ser campeón debido a su diferencia de goles, mientras que Uruguay debía ganar. El escenario estaba listo para un duelo épico en el Estadio Maracanã de Río de Janeiro.
El Maracanazo: La final no oficial
El 16 de julio de 1950, más de 200,000 personas abarrotaron el Maracanã para ver lo que muchos asumían sería la coronación de Brasil. La atmósfera era de fiesta, y el equipo local contaba con figuras como Zizinho, Ademir y Jair, que habían brillado durante todo el torneo. La prensa brasileña y la afición ya celebraban el título, confiados en que su selección se impondría a los uruguayos.
El partido comenzó con un Brasil dominante. Al minuto 47, Friaça anotó el primer gol, desatando la euforia de los espectadores. Parecía que el campeonato estaba asegurado. Sin embargo, Uruguay no se rindió y, en el minuto 66, Juan Alberto Schiaffino empató el partido. La tensión en el estadio era palpable.
Brasil, que hasta ese momento había mostrado un juego ofensivo, comenzó a desorganizarse bajo la presión. Finalmente, en el minuto 79, Alcides Ghiggia, delantero uruguayo, avanzó por la banda derecha y disparó al arco, venciendo al portero Barbosa. Uruguay se ponía en ventaja 2-1 y el estadio quedó en silencio absoluto.
La reacción y el impacto del Maracanazo
El pitido final decretó la victoria de Uruguay, que se consagraba campeón mundial por segunda vez. La derrota fue un golpe devastador para Brasil, que ya se veía levantando el trofeo. Este episodio, conocido como el “Maracanazo”, dejó una profunda marca en el fútbol brasileño y generó un sentimiento de tristeza nacional. El portero Barbosa fue injustamente responsabilizado y sufrió el estigma de este gol durante toda su vida.
Para Uruguay, el Maracanazo es recordado como un triunfo histórico y uno de los logros más importantes en su fútbol. El equipo liderado por Obdulio Varela demostró coraje y determinación, superando a un Brasil que parecía invencible. Este partido quedó en la memoria colectiva de los uruguayos como un símbolo de orgullo y resistencia.
La trascendencia del Mundial de 1950
El Mundial de 1950 marcó un antes y un después en la historia del fútbol. El formato de liguilla en la fase final no se volvió a utilizar en ediciones posteriores, y el Maracanazo quedó grabado como una de las mayores sorpresas en la historia de los mundiales. Para Brasil, la derrota fue una lección que cambiaría la historia de su fútbol, impulsando el desarrollo de su estilo y motivándolos a buscar la redención en futuros torneos.
Este torneo no solo definió a Uruguay como campeón del mundo, sino que también dejó un legado cultural profundo en América Latina. La historia del Maracanazo continúa siendo narrada como un recordatorio de que, en el fútbol, nada está garantizado hasta el último minuto.
Referencias
- Bellos, Alex. Futebol: The Brazilian Way of Life. Bloomsbury Publishing, 2002.
- Galeano, Eduardo. El fútbol a sol y sombra. Siglo XXI, 1995.
Aquí están todos los resultados.
Primera fase
Grupo 1
- Brasil 4 – 0 México: Brasil comenzó con una victoria contundente sobre México.
- Yugoslavia 3 – 0 Suiza: Yugoslavia venció con claridad a Suiza.
- Brasil 2 – 2 Suiza: En un partido parejo, Suiza sorprendió al empatar con Brasil.
- Yugoslavia 4 – 1 México: Yugoslavia ganó sin dificultades, eliminando a México.
- Brasil 2 – 0 Yugoslavia: Brasil aseguró su clasificación al vencer a Yugoslavia.
Grupo 2
- Inglaterra 2 – 0 Chile: Inglaterra inició con una victoria sobre Chile.
- España 3 – 1 Estados Unidos: España debutó con una victoria frente a Estados Unidos.
- España 2 – 0 Chile: España avanzó a la siguiente ronda al vencer a Chile.
- Estados Unidos 1 – 0 Inglaterra: En una de las sorpresas del torneo, Estados Unidos venció a Inglaterra.
- España 1 – 0 Inglaterra: España eliminó a Inglaterra con otra victoria cerrada.
- Chile 5 – 2 Estados Unidos: Chile cerró el grupo con una victoria sobre Estados Unidos.
Grupo 3
- Suecia 3 – 2 Italia: Suecia venció al campeón defensor, eliminando a Italia.
- Suecia 2 – 2 Paraguay: En un partido parejo, Suecia y Paraguay empataron.
- Italia 2 – 0 Paraguay: Italia venció a Paraguay, pero no fue suficiente para avanzar.
Grupo 4
- Uruguay 8 – 0 Bolivia: Uruguay ganó en su único partido del grupo, clasificándose a la fase final.
Fase final (Liguilla)
Brasil 7 – 1 Suecia
Brasil dominó a Suecia en su primer partido de la liguilla, mostrando un juego ofensivo arrollador.
España 2 – 2 Uruguay
Uruguay y España empataron en un encuentro parejo, en el que ambos equipos se mostraron competitivos.
Brasil 6 – 1 España
Brasil volvió a exhibir su gran nivel al golear a España, posicionándose como favorito para ganar el título.
Uruguay 3 – 2 Suecia
Uruguay venció a Suecia en un partido reñido, asegurando que llegaría al último partido contra Brasil con la posibilidad de ser campeón.
Brasil 1 – 2 Uruguay (Maracanazo)
En el último partido de la liguilla, Uruguay derrotó a Brasil 2-1 en el famoso “Maracanazo,” consagrándose campeón del mundo en una de las mayores sorpresas en la historia del fútbol.
Uruguay se llevó el título al terminar en primer lugar de la fase de liguilla, seguido de Brasil, Suecia y España.